El día Internacional de la eliminación de la violencia contra la Mujer 2022

Hoy, como cada 25 de noviembre,  se celebra el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. El Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres es un día conmemorativo instituido por la Asamblea General de las Naciones Unidas, con la Resolución 54/134 del 17 de diciembre de 1999.

La Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 25 de noviembre como aniversario e invitó a los gobiernos, las organizaciones internacionales y las ONG que organizaron actividades ese día para sensibilizar a la opinión pública sobre el problema de la violencia contra las mujeres.

Este año la campaña se desarrollará bajo el lema global ÚNETE 2022: “¡ÚNETE! Activismo para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas”. El evento destacará el poderoso papel de los movimientos por los derechos de las mujeres en la prevención y eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas; movilizar a más personas para apoyar los esfuerzos para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas y frenar el retroceso de los derechos de las mujeres; y poner en marcha las actividades de los 16 Días de Activismo.

¿Por qué se celebra el 25 de noviembre de cada año?

El 25 de noviembre es la fecha que identifica una lucha que hay que hacer diariamente, la Lucha contra la Violencia contra las Mujeres. Se eligió el 25 de noviembre porque en esa fecha de 1960 fueron asesinadas tres hermanas heroínas que lucharon con todas sus fuerzas por la liberación de la República Dominicana, las hermanas Mirabal, cuya lucha las vio terminar en manos  de los agentes del dictador Rafael Trujillo.

Las tres hermanas Patria, Minerva y María Teresa, nacieron y crecieron en Ojo de Agua, República Dominicana. Vivieron su juventud en los años de la dictadura trujillista, una de las más duras de América Latina. Cuando Trujillo llegó al poder, su familia (como muchas otras en el país) perdió casi totalmente sus bienes, primero nacionalizados, luego directamente incautados por el dictador en sus bienes privados.

Las hermanas Mirabal decidieron en los años cincuenta comprometerse con decisión en la lucha contra la dictadura. Crearon un grupo político clandestino que se expandió por todo el país, estructurado en núcleos que lucharon contra la dictadura.

En enero de 1960, el movimiento fue descubierto por la policía secreta de Trujillo y sus miembros fueron perseguidos y encarcelados; entre ellos las hermanas Mirabal y sus maridos.

Las hermanas fueron liberadas unos meses después, pero sus cónyuges permanecieron recluidos. El 25 de noviembre de 1960 las hermanas Mirabal, acompañadas por el chófer Rufino de la Cruz, fueron a visitar a los esposos Manolo y Leandro, trasladados a la cárcel de la ciudad de Puerto Plata. El coche en el que viajaban las tres hermanas y el conductor fue interceptado y los pasajeros fueron obligados a bajar del vehículo y conducidos a un lugar apartado, una plantación de caña de azúcar, donde fueron asesinados a palos. Sus cuerpos fueron devueltos al vehículo en el que viajaban, que fue derribado por un acantilado para simular un accidente. Sin embargo, esto llevó a más manifestaciones y protestas contra el régimen.

¿En qué consiste la violencia contra las mujeres?

La Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer emitida por la Asamblea General de la ONU en 1993, define la violencia contra la mujer como “todo acto de violencia que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o sicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”.

La violencia no es unidimensional, sino que puede manifestarse y ejercerse de diferentes maneras. En forma general, la violencia se manifiesta de forma física, sexual y psicológica e incluye:

• violencia por un compañero sentimental (violencia física, maltrato psicológico, violación conyugal, femicidio);
• violencia sexual y acoso (violación, actos sexuales forzados, insinuaciones sexuales no deseadas, abuso sexual infantil, matrimonio forzado, acecho, acoso callejero, acoso cibernético);
• trata de seres humanos (esclavitud, explotación sexual);
• mutilación genital, y
• matrimonio infantil.

Aunque todas las mujeres, en todas partes del mundo, pueden sufrir violencia de género, algunas mujeres y niñas son particularmente vulnerables, ejemplo de ellas son las niñas y las mujeres más mayores, las mujeres que se identifican como lesbianas, bisexuales, transgénero o intersex, las migrantes y refugiadas, las de pueblos indígenas o minorías étnicas, o mujeres y niñas que viven con el VIH y discapacidades, y aquellas en crisis humanitarias.

La realidad de la violencia en cifras

Algunos datos básicos de la ONU sobre la violencia contra la mujer en el mundo:

• En todo el mundo, una de cada tres mujeres ha sufrido violencia física o sexual, principalmente por parte de un compañero sentimental. Cuando se trata de acoso sexual, esta cifra es todavía mayor.
• A nivel mundial en 2017, en casi tres de cada cinco casos de mujeres asesinadas, el autor era su compañero sentimental o un miembro de su familia.
• Aproximadamente 15 millones de mujeres adolescentes (de entre 15 y 19 años de edad) de todo el mundo han sufrido relaciones sexuales forzadas en algún momento de su vida.
• Entre el 45% y el 55% de las mujeres en la Unión Europea ha sufrido acoso sexual desde los 15 años de edad.
• El 72% de todas las víctimas de trata a nivel mundial son mujeres y niñas. 4 de cada 5 mujeres víctimas de la trata son utilizadas para la explotación sexual.
• Al menos 200 millones de mujeres y niñas de edades comprendidas entre los 15 y los 49 años se han visto sometidas a la mutilación genital femenina en 30 países donde hay datos representativos disponibles. En casi todos esos países, la ablación se practicó en la mayoría de las niñas antes de que cumplieran cinco años.
• 650 millones de mujeres y niñas que viven hoy en día se casaron antes de cumplir 18 años. Casi 4 de cada 10 niñas de África subsahariana se casaron antes de cumplir 18 años.

España no escapa a esta grave problemática. Según el Informe anual sobre violencia de género hecho público el 13 de octubre por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ),  todos los indicadores de la violencia machista experimentaron durante el segundo trimestre de 2022 un significativo aumento con respecto al mismo periodo del año anterior en España. El número de denuncias por violencia de género subió un 12,33% al registrarse un total de 45.743, una cifra también superior a la de denuncias presentadas en el primer trimestre de 2022, cuando sumaron 41.765. El número de mujeres víctimas ascendió a 44.543, un 10,89% más que en el mismo periodo de 2021 y un 10% más que entre enero y marzo pasados. El 66% son españolas.

Según el Consejo General del Poder Judicial, existe una evolución al alza de las órdenes de protección acordadas por los órganos judiciales durante el trimestre analizado, en total 8.662, lo que supone un 8,7% más que hace un año, así como del porcentaje de sentencias condenatorias, que alcanzó el 76,84% del total de dictadas frente al 75,22% registrado en el segundo trimestre de 2021.

Estos datos se traducen en un aumento de la tasa de mujeres víctimas por cada 10.000 mujeres registrada en toda España, que ha pasado de 16,6 en el segundo trimestre de 2021 a 18,4 (1,8 puntos más).

Las cifras no son más que el reflejo de una peligrosa tendencia que tiene su reflejo también en las actitudes de algunos sectores de la sociedad ante esta grave problemática. Por ejemplo, según los datos del III Macroestudio de Violencia de Género “Tolerancia Cero”,  un 20% de los jóvenes entre 18 y 21 años considera que golpear a la pareja o insultarla no es violencia de género, y el 15,15% considera que amenazar a la pareja tampoco es maltrato. Se trata de un pensamiento mayoritario entre los varones pues son los chicos sobre todo los que piensan de esta manera, de forma que para el 21,16 % golpear no es violencia (frente al 11,58 % de las chicas de esa edad); insultar a la pareja no lo es para el 22,41 % (y así piensan el 10 % de ellas); amenazar no se considera maltrato para el 20,75 % (8,42% de las chicas) y controlar el móvil no lo es para 25% de varones de menos de 21 años (frente a un 17,89% de ellas).

Se trata de una terrible contaminación de discursos regresivos que provocan que la juventud tienda cada vez más a pensar que este problema es un “invento ideológico”.  Así, según el barómetro Juventud y Género 2021, realizado por el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud de la FAZ el 20% de los adolescentes y jóvenes entre 15 y 29 años niega la existencia de la violencia de género, lo que supone el doble que hace cuatro años. El cambio de tendencia coincide con el auge de la extremaderecha y su discurso.